


CONEXIONES ENTRE COLOMBIA Y LA MASONERÍA EN LA DÉCADA DE MIS 20 AÑOS
Por Ricardo Ricart Vila
Dudaba sobre si compartir con vosotros esta carta amable y diplomática de presentación. Pero, me emocionan las conexiones que se producen en mi vida, especialmente cuando no son planeadas y mucho menos esperadas.
Esta carta la he encontrado en las carpetas donde guardé mis cosas de la década de mis veinte años, las que hace pocos meses empecé a abrir y revisar con el objetivo de limpiar y vaciar contenido. Aún no he podido desprenderme de nada, así que, he ordenado el contenido, quitado el polvo y agrupado en nuevas cajas, ya no de cartón sino de plástico.
Esta carta formaba parte de una carpeta junto a otros documentos, y recomendaciones de mi Universidad, para la gestión de un visado para residir en Colombia durante un tiempo, por motivos de estudios sobre culturas precolombinas. Inicié los trámites; pero decidí suspenderlo y realizar primero el servicio militar, lo que no sabía es que al finalizar la etapa "castrense" mi vida iba a conducirse por otros terrenos, tampoco sospechaba, tan lejos de mi imaginación, que me formaría en lo que, en aquella época, no sé ahora, se denominaba “escuelas de negocio de reconocido prestigio” :), dedicándome a la empresa privada, pero esto es otra historia con muchos retos, incertidumbres, dificultades, aprendizaje, crecimiento profesional y personal, y grandes satisfacciones con viajes a lo largo y ancho de este mundo, en su sentido más literal.
Las conexiones se han producido durante estos dos últimos años en Bogotá. Mi relación con Alirio Gómez Picón venía a través de sus hijos pequeños, los de mi edad, fuimos y somos amigos, también compañeros de clase. Fue después de que Alirio pasara al Eterno Oriente, cuando me enteré, al igual que me pasó con otras personas de mi alrededor, de su condición de hermano masón, llevaba algunos años en sueños. Para mí, así como para otros, fue uno modelo y ejemplo como ser humano y “señor”, ignorando su vínculo con la Fraternidad, y no os extrañará cuando leáis este breve curriculum, a través del cual se intuye y percibe esa mezcla tan especial de político, diplomático, estudioso, y buena persona, nada usual hoy en día cuando lo que prevalece es el político de bajo nivel personal, sin clase, parásito, trepa, chusquero e inmoral, aunque se disfracen de lo contrario:
Alirio Gómez Picón, abogado, historiador académico, estadista y diplomático.
Historiador sobre la historia de Colombia y Venezuela, especialmente de las figuras de Bolívar y Páez: “Bolívar y Santander. Historia de una amistad”, “Páez fundador del estado venezolano”, entre otros trabajos.
Ministro del Gobierno Colombiano, nombrado por primera vez en 1943.
Miembro de la Academia Colombiana de Historia.
Embajador de Colombia en Ecuador.
Embajador de Colombia en la Alemania RFA, antes de ser unificada con la RDA.
Embajador de Colombia en la antigua URSS, Republicas de la Unión Soviética.
Cónsul General de Colombia ante la CEE, entre otros, y como último destino de su trayectoria profesional y política.
Miembro de la Sociedad Económica de Amigos del País.
Y hermano de la Gran Logia de Colombia, huelga contaros nada más. La conexión la podéis encontrar en las publicaciones sobre mis visitas a Bogotá durante estos dos últimos años.
Os adjunto unas imágenes para ilustrar esta historia, unas tomadas en Brujas (Bélgica), creo que un año antes de escribirse esta carta, otra en el Museo Británico, en Londres, en el que, en esa época, a temporadas, hice de guía en el museo para los hispanohablantes, ¡cómo lo disfruté!, mostrando las colecciones de todas las salas, pero especialmente en las galerías de las culturas que se enmarcan dentro de la Historia Anrtigua: Egipto, Mesopotamia, Grecia, Roma...¡síganme por favor! Tenemos ante nosotros el primer texto plurilingüe antiguo descubierto, conocido como la "Piedra Rosseta", un fragmento de una estela egipcia datada en el año 196 a.C, con una inscripción en tres escrituras diferentes de un Decreto de Ptolomeo V,... el francés Jean-François Champollion descifró...Me tenía que frenar o el recorrido por el museo se hacia interminable :) :) :) .En esa imagen en el Brithis Museum con Emily la esposa de Alirio, y madre de mis amigos.
Añadiré unas imágenes de mis amigos y un par de mi hermano Mikel, que falleció al finalizar la década de sus veinte años dejándonos a todos un gran vacío, él era un año justo menor que yo, viviendo casi como gemelos no nos parecíamos ni físicamente ni en la personalidad, solo en la altura, Pero siempre me apoyó en mis locuras aunque no participase en ellas.
La dirección y teléfono que se indica en la carta ya no existen.